La Energía y el Reiki

 

 

En mi opinión la gente no tiene un concepto claro de lo que es la energía, siempre creen que se trata de algo místico y/o fantasioso, pero no es así, la energía está en todas partes (en la naturaleza, en el espacio exterior...), todo tiene energía e interactúa con ella.

 

Naturalmente, todos los seres vivos controlan la energía (incluso el ser humano sin darse cuenta). A nosotros, los humanos, se nos ha dado el don de poder llegar a controlar la energía conscientemente y así aprovechar más sus beneficios y funciones, pero la mayoría no lo hacemos porque aún no hemos abierto nuestras mentes a conceptos como la energía, el reiki y el Universo.

 

La energía está presente también en nuestro estado de ánimo... Cuando una persona está muy feliz envía esa energía a todas partes y los demás son capaces de sentirla (aunque tal vez no se den cuenta), y esta energía se "contagia" a los demás, ¿Nunca se han preguntado por qué hay personas que tienen "risas contagiosas" y que cuando ellos empiezan a reír todo el mundo también se pone a reír con ellos y (aunque sea por un momento) todos olvidan sus preocupaciones? La respuesta es simple: esas personas desprenden una gran cantidad de energía positiva al reírse y nosotros recibimos esa energía positiva y nos sentimos mejor...

 

Pero, tal y como todo lo que existe, la energía tiene dos caras: la energía positiva y la energía negativa, así que también puede ocurrir el caso inverso al cual acabo de describir... Muchas veces hay momentos en los cuales una persona se siente furiosa, frustrada o deprimida, y (sin darse cuenta) la persona desprende grandes cantidades de energía negativa, y esa energía contagia a las personas a su alrededor, haciendo que estas se sientan mal y, muchas veces, se aparten de esa persona porque no pueden soportar estar ahí...

 

A mí me pasa muchas veces que, cuando las personas que están cerca de mí empiezan a desprender energía negativa se me comprime el corazón y me cuesta respirar (esto también me pasa cuando yo misma desprendo energía negativa). En estos casos, lo mejor es hacernos un escudo protector a nosotros mismos para que la energía de la persona no nos afecte.

  

También hay que ser conscientes de que los lugares también tienen distintas energías. La energía del lugar puede ser alterada por sucesos ocurridos ahí; la energía de un lugar puede ser positiva o negativa. Cuando nos encontramos en un lugar de mala energía lo mejor que podemos hacer es “limpiar” el lugar; este es un proceso bastante sencillo, simplemente tenemos que mandar grandes cantidades de energía positiva al lugar para cambiar la energía de ese lugar (también es importante que corra aire en el lugar, para que la energía negativa pueda irse).

 

Por eso, es importante aprender a controlar nuestras emociones y nuestra energía... Pero esta energía que producimos inconscientemente no es ni una pequeña parte de lo que la energía puede hacer; la energía es mucho más poderosa que eso... Una de las funciones más maravillosas de la energía es la sanación.

 

El reiki se basa en la imposición de manos para canalizar la energía sanadora del Universo y transmitírsela a otra persona para sanarla. Algo importante que hay que saber con respecto al reiki es que cuando uno pasa energía no debe dar a la otra persona su propia energía, porque si hiciera esto, uno se enfermaría; por lo tanto, uno, en lugar de dar su energía, debe hacer de canal, permitiendo así que la energía del Universo fluya a través de uno hacia la otra persona; de este modo, la energía que se pasa a la otra persona es la energía sanadora del Universo, no la propia. El reiki sirve para sanar físicamente a las personas, pero también sirve para ayudar a las personas a sanar sus corazones y mentes. El reiki también sirve para alcanzar el estado máximo de iluminación y plenitud.

 

Yo tengo sólo 14 años, pero ya tengo alguna experiencia con el reiki y la energía: cuando tenía 10 años, mi madre comenzó a hablarme sobre estos temas, y yo me entusiasmé y comencé a trabajar con la energía; al principio mi energía era débil, y necesitaba estar muy concentrada en la energía cuando quería pasar reiki; otro de mis problemas era que, sin darme cuenta, pasaba mi propia energía, por eso siempre después de pasar reiki me sentía débil y a veces hasta me enfermaba, pero con el tiempo y la experiencia (y principalmente cuando empecé a despertar a un plano superior) mi energía empezó a hacerse más fuerte y también aprendí que siempre hay que hacer de canal para que pase la energía del universo.

 

Patricia Fernández